El juez Scott McAffee, a cargo del caso abierto en Georgia contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) por injerencia electoral, rechazó este jueves su pedido de desestimarlo.
El juez alegó que la defensa no ha podido demostrar que sus declaraciones y conductas supuestas estén amparadas por la libertad de expresión y destacó que el tribunal tampoco ha encontrado pruebas para defender esa tesis.
El equipo republicano se había basado en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que protege el derecho a la libertad de expresión.
Trump y otros 18 “cómplices” están acusados en Georgia de formar una asociación criminal con el objetivo de anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en ese estado, que ganó el demócrata Joe Biden.
El cargo de asociación criminal presentado por la fiscal de distrito Fani Willis es el mismo que han utilizado otros fiscales en el pasado para desarticular organizaciones mafiosas.
McAffee ya había rechazado solicitudes similares que habían hecho otros acusados en este caso tratando de basarse en la Primera Enmienda.
El juicio en Georgia aún no tiene fecha. La fiscal afirmó que estaría lista en agosto, pero el magistrado no se ha pronunciado.
De los cuatro procesos penales en su contra, el primero que comenzará, el 15 de abril, será en Nueva York por pagos electorales irregulares a la actriz porno Stormy Daniels para comprar su silencio durante la campaña de 2016.
En Washington también tiene otro abierto por intromisión electoral, mientras que en Florida se le acusa de sustraer documentos clasificados de la Casa Blanca cuando dejó el poder, que guardaba en su mansión de Mar-a-Lago. EFE