El exárbitro hondureño Mario Moncada denunció públicamente que antes de convocar un clásico hondureño le trajeron una maleta con 500.000 lempiras con 500 cigarros.
El ahora director de la Comisión Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (CONDEPOR) dio unas explosivas declaraciones a Futcatracho y destapó varias irregularidades que afirmó haber denunciado anteriormente en la Fenafuth.
“El arbitraje es un nido de corrupción, entonces ¿quién lo gestiona? Cumplí con mi deber de denunciar la corrupción, cumplí con mi deber de llevarle a Alfredo Hawit los depósitos que se le hicieron a los árbitros, a algunos presidentes de equipos, cumplí con mi deber. ¿Pero qué haría si Alfredo me dijera…? Por ejemplo, cuando me dejaron la etiqueta de un billete en una maleta, que no olvidaré, en un hotel de cinco estrellas. Mientras estaba el emisario con el dinero, hablé con Alfredo. ¿Por qué no habla con el presidente de la comisión? “No hablé con Alfredo, él me lo dijo y yo le dije porque Alfredo es el secretario de la federación y la imagen, el arquitecto y la imagen del futuro”, comenzó diciendo.
Lo añadió en vísperas de un clásico. ”Le dije al emisario: no me conoces. Soy bocazas, nosotros en los pueblos somos bocazas no por malas intenciones, tal hijo DP no me conoces. “No sé cuánto valió ese juego porque me sacaron 500.00 lempiras en billetes de 500 y los denuncié”.
Moncada afirma que denunció a varios denunciantes, entre ellos uno que estaba en trío con él. ”Alfredo sabe que lo hice. Le traje a Alfredo depósitos de dos árbitros que le hice, que representaban a presidentes de la Liga Nacional, con quienes peleé en muchas ocasiones. Y lo que le hizo Alfredo, a un árbitro asistente y a un árbitro, pues lo sacó del architraje de manera disimulada. Pero uno de los árbitros con más actos de corrupción, y me di cuenta después, lamentablemente estuvo mucho tiempo conmigo como asistente, quien se presentó por cargos mayores de corrupción en el arbitraje, luego estuvo en la federación, luego desfiló como árbitro espectador internacional. “Lo pillaron baleado en Tegucigalpa y desapareció del árbitro público a nivel arbitral porque lo pillaron baleado en el auto”.
Dijo que “la otra vez me habló Héctor Rodríguez, enojado conmigo, enojado, tengo una alta opinión de Héctor, pero a veces en la vida es necesario. Porque un dirigente de Victoria cogió el teléfono y le dijo a Orlando Ponce MOrazán, voy a mencionar el nombre. Le voy a dar el nombre y mencionó a Héctor Rodríguez, en la gasolinera tal, tal y tal, fui a dejarles 80 mil lempiras. Hoy me arrepiento, pero se los di. Eso pasa en el arbitraje, ¿por qué los ocultan? “Me gustaría que el periodismo deportivo fuera periodismo de investigación”.
Detalló que alguna vez dirigió una final de Segunda División. “Y la final de segunda división, normal, imagínate una acción que termina en gol y en primeros juegos, y terminó 0 a 0, me dice el doctor Mario, me dice que hay un partido difícil, en segunda división, lo hice. No dirigí en el segundo. Porque no me consideré un árbitro de segunda, puedo decir que estoy loco, trastornado, entonces no dirigí”.
Agregó que “una vez me nombraron para la final de segunda división en Islas de la Bahía, cuando este equipo de Islas de la Bahía perdió la final, creo, contra Deporte Savio. Y Argelio Sabillón me llamó y me dijo, el domingo vas a dirigir la final de segunda división. Y le dije que no iba a pitar en segunda. El alcalde de un pueblo me pagaba viáticos como árbitro de alto nivel. La final con un árbitro de primera en un partido de segunda, que es lo que yo quería. Entonces no fui. Y lo dejé ahí. Porque, ¿sabes que dirigirás la final? ¿Quieres buscar la historia? Ricardo Zelaya, yo no me presenté a ese partido”.
Esa historia no terminó ahí, según Moncada. “Recibo una llamada y me dicen que les devuelva los 200.000 lempiras que me envió, sino eres hombre muerto, me dijeron. O sea, me mandaron 200.000 lempiras por ese juego y nunca me los dieron. Alguien negoció y que yo me iba a prestar para arreglar un partido. Y como el partido acabó cero a cero, le llamaron para decirme que me devolvía 200.000 libras, que me vieron enviado. ¿Y si no fuera hombre muerto? Y… Y fui amenazado durante dos años. Y todos los días me decían, vas a tal lugar, eres hombre muerto. “Lo denuncié”.
Moncada cuenta que en otro programa “en vivo, en San Pedro Sula, antes de un partido, le dije a un chico que trabaja en Televicentro. Le dije, mírame, está seriamente amenazado. Pero él es un líder. Un dirigente del fútbol hondureño. Y si me pasa algo, en esas grandes distancias que recorren los árbitros de fútbol, tienen que investigar, él fue un líder. “No quería hacer tantos escándalos porque todavía no había planeado retirarme”, dijo.