TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Ana García, ex primera dama de Honduras y esposa de Juan Orlando Hernández, Habló del segundo día del juicio al expresidente y lo calificó de “trama novelesca” en un tribunal donde lamentó que había “un espacio reservado para su familia”, pero que estaba vacío.
“Quiero comenzar agradeciendo los miles y miles de mensajes que hemos recibido del pueblo hondureño donde fehacientemente reconocen que son víctimas de una venganza del narcotráfico, son víctimas de una conspiración política y de una negociación en su contra”, comenzó García. diciendo.
La exprimera dama lamentó que “los delincuentes confesos pueden tener a su familia con ellos, pero en el caso de Juan Orlando, un expresidente que fue aliado del gobierno de Estados Unidos, quien demostró con acciones y no con palabras los extraordinarios resultados en su compromiso para defender la seguridad de recuperar la paz y la seguridad de millones de hondureños, hoy no pudo estar con su familia.
Violar los principios fundamentales del derecho a la legítima defensa y al trato justo de una persona inocente.
Ante los medios, García citó la frase utilizada por el abogado defensor Renato Estabile: “El infierno está vacío y todos los demonios están aquí”, al referirse a los criminales, asesinos y narcotraficantes que testifican contra su marido.
Durante su presentación, la abogada también destacó todas las acciones que Hernández emprendió durante su mandato y las acciones que resultaron en amenazas de muerte por desmantelar todos los cárteles que operaban en Honduras.
Ante la falta de pruebas, destacó que resulta irónico que la misma ley de extradición que aprobó sea la que ahora lo tiene juzgado en Nueva York.
Respecto a las fotografías, García destacó que la defensa argumentó que Hernández era una celebridad y se tomó fotos con miles de personas, incluso descartó que las siglas ‘TH’, plasmadas en un kilo de cocaína, no signifiquen Tony Hernández y significa Tommy Hilfiger.
“En el juicio desigual contra mi esposo hubo un espacio para su familia. Pero a mi familia le revocaron la visa y no pudimos acompañarlo”, explicó al informar que sus hijos solicitaron una visa de emergencia, sin embargo, le fue negada luego de tres meses de espera.
Luego cuestionó que los dos testigos aceptaron que no tenían pruebas y advirtió que durante los próximos días el pueblo escuchará “historias ficticias” y mentiras de quienes buscan reducir sus penas.